¡My dear Fujiyama Mamas!
Hoy tengo el honor de hablar de Etta. Ella me encanta, y además estoy segura de que todos y todas la conocéis aunque quizás algunos no lo sepáis.
Etta, o Jamesetta Hawkins, nació en Los Angeles hace 72 años, en 1938. A los cinco años obtuvo su primera clase de canto y ya se hizo evidente que la voz de la pequeña era mucho más que un don. ¡Etta apuntaba maneras! Bastante jovencita grabó el que en el 1955 sería su primer gran éxito "The Wallflower (Roll with me, Henry)". Y por supuesto, quién no ha escuchado una y otra vez temas como "I Just Want to Make Love to You" o "At Last", canción que la artista ha seguido cantando a lo largo de las últimas décadas en repetidos tv shows.
Está claro que el físico de Etta no seguía ni sigue los cánones de belleza que estaban de moda antes ni ahora, pero su ángel es tan grande, su personalidad tan intensa y su voz tan única y auténtica, que al menos a mi parecer los prototipos quedan totalmente atrás y lo que tenemos es una mujer increíble y arrolladora con un look súper peculiar a la par que genial. ¡Una Fujiyama Mama de cabo a rabo, vamos!
No hay que olvidar lo complicada que ha sido su vida desde bien jovencita. Empezando por su trauma familiar, pues su madre la tuvo a los 16 años con un hombre blanco que nunca la quiso ver, lo cual desarrolló en la cantante un complejo de raza muy grande. A lo largo de su vida ha sufrido larguísimos periodos de adicción a múltiples drogas, la más importante de ellas, la heroína, muy de moda en el mundillo de la época. Ha estado ingresada en varios centros de reposo y desintoxicación. Además sufrió un trágico desamor, aunque con final semi feliz con el dueño de la discográfica que la lanzó a lo más alto del firmamento.
La artista ha seguido, aunque con muchos trompicones en su vida personal, una carrera musical de Gospel, Rhythm and Blues y Jazz más o menos constante hasta el año 2009. Y respecto al año 2010 ignoraré el resbalón de pésimo gusto que tuvo con Beyoncé y el presidente Obama cuando éste fue elegido. Como todas tenemos nuestro ego y los años y la vida no perdonan, lo pasaré por alto pero ahí dejo la puntilla para el que le interese.
Si queréis conocer una pequeña parte más sobre ella y tenéis un mínimo de curiosidad por la historia de la música y otras cositas como la creación de las primeras discográficas, os recomiendo, de verdad, la película Cadillac Records de Darnell Martin protagonizada por Adrien Brody, Jeffrey Wright y Beyoncé Knowles. Además de que es muy bonita y "hace llorar", la estética del film es genial y pese a que la voz de Beyoncé es totalmente distinta a la de nuestra querida Etta, aunque no por ello peor, la joven Bee no se queda nada corta.
Espero que os haya picado la curiosidad tanto como a mí y os aficionéis a Etta si no lo estabais ya. Para empezar os dejo un par de vídeos, y lo demás ¡ya es cosa vuestra!
¡Muchas gracias por leer hasta aquí y espero que estéis al tanto del blog porque estoy segura de que a vosotros/as también os encantan las Fujiyama Mamas!
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